SIN MUJERES Y TODOS MIEMBROS DE SU FORMACION
Los talibanes revelaron ayer los nombres clave del nuevo Gobierno de Afganistán, que estará liderado por Mohammad Hasan Akhund, no tendrá mujeres y la totalidad de sus miembros pertenecen a la formación islamista.
Poco más de tres semanas después de haber tomado el poder, el grupo anunció parte de su futuro Ejecutivo, que tendrá como primer ministro a Akhund, un colaborador cercano y consejero político del fundador del movimiento y jefe supremo, el mullah Omar.
Su número dos será el cofundador de los talibanes Abdul Ghani Baradar, una figura respetada por varias facciones de los insurgentes, ya que estuvo al frente de las negociaciones de Doha con Estados Unidos que condujeron a la retirada de las fuerzas extranjeras del país.
Entre los otros nombramientos anunciados se encuentra el del mullah Yaqub, hijo del mullah Omar, para el cargo de ministro de Defensa; y el de Sirajuddin Haqqani, jefe de la red Haqqani, que estará al frente de la cartera de Interior.
El mullah Omar, fallecido en 2013, pero cuya muerte fue ocultada durante dos años, también fue fundador de los talibanes tras la invasión soviética en 1979, que lo convirtió en muyahidín, un combatiente islámico fundamentalista.
La red Haqqani, por su parte, es una facción guerrillera dentro del grupo, vinculada a Al Qaeda, considerada "organización terrorista" por EEUU y señalada por estar involucrada en varias actividades delictivas, entre ellas el tráfico de drogas.
Amir Khan Muttaqi, otro de los negociadores talibanes de Doha, será el nuevo ministro de Relaciones Exteriores y tendrá la función de reconfigurar las relaciones con el resto de los países, con los nuevos aliados y con Occidente.
"El Gobierno no está completo", subrayó Zabihullah Mujahid, principal portavoz de los talibanes durante la conferencia de prensa en Kabul en la que anunció la nueva administración.
El movimiento -que prometió un Ejecutivo "inclusivo"- intentará "incorporar a gente de otras regiones del país", indicó el vocero, algo que no ocurre con el anuncio de hoy que no incluye mujeres y que tiene a 30 de los 33 funcionarios de origen pastún, el grupo étnico de origen iranio al que suelen pertenecer los talibanes.
La comunidad internacional aseguró que juzgaría a los talibanes por sus actos, después de que el movimiento islamista recuperara el poder tras haber sido expulsado EEUU y la OTAN en una ocupación que duró 20 años.
En Herat (oeste), dos personas murieron y ocho fueron heridas de bala durante una concentración antitalibanes, según un médico local citado por la agencia de noticias AFP.
Son los primeros muertos registrados en las manifestaciones contra el nuevo régimen celebradas en los últimos días en varias ciudades del país.
"Estas manifestaciones son ilegales hasta que las oficinas del Gobierno no estén abiertas y se hayan proclamado las leyes", advirtió el vocero Mujahid y pidió a los medios de comunicación "que no cubran" esas protestas.
De momento, las promesas en cuestión de derechos de las mujeres tampoco se cumplen.
En los últimos días, decenas de mujeres afganas protagonizaron varias manifestaciones en Kabul para denunciar la violenta represión del régimen talibán en el valle del Panjshir, foco de la resistencia del ejército afgano.
En ese marco, varias personas resultaron heridas hoy después de que los talibanes abrieran fuego contra manifestantes en Kabul para dispersar la multitud que protestó contra una reunión de seguridad con autoridades de Pakistán, país vecino en el que se refugiaron varios líderes del movimiento islamista.
"Primero los talibanes abrieron fuego al aire y luego comenzaron a disparar contra los manifestantes, varios resultaron heridos", dijo un manifestante a la agencia de noticias Sputnik.
Agregó que cerca del palacio presidencial los talibanes detuvieron a varias mujeres que participaban en la manifestación.