En 1843, cuando su madre falleció, su padre lo llevó a vivir al campo por recomendación médica. En el entorno campestre tomó contacto con gauchos. Allí conoció sus costumbres, su mentalidad, su lenguaje y su cultura. Aprendió a quererlos, a admirarlos, a comprenderlos, y también a entender sus dificultades en la vida cotidiana.
En marzo de 1857, poco después de fallecer su padre, se instaló en la ciudad de Paraná, donde el 8 de junio de 1859 contrajo matrimonio con Carolina González del Solar. Tuvieron siete hijos.
Inició su labor periodística en el diario El Nacional Argentino, con una serie de artículos en los que condenaba el asesinato de Vicente Peñaloza.