COLOMBIA
Ciudad Bolívar, uno de los lugares donde el presiente electo, Gustavo Petro, sacó más votos en el balotaje del domingo, es una localidad popular del sur de Bogotá, a la que el resto de la capital mira con temor pero que tiene una fuerte organización para hacer que los servicios básicos lleguen y donde su gente mira con esperanza al próximo gobierno.
"¡No vayan solos!" Es el imperativo que se escucha cada vez que alguien de afuera de Ciudad Bolívar dice que quiere ir allí. Es la primera barrera simbólica para acceder a esta localidad del sur de Bogotá en las que la mayoría de su población (casi 75%) votó por Gustavo Petro el domingo pasado.
También te puede interesar:
De las tres localidades de Bogotá en las que el Pacto Histórico obtuvo más porcentaje de votos, es donde reunió más adhesiones en términos absolutos (arriba de 200 mil).
Para conocer Ciudad Bolivar hay que "subir" por el "metrocable" (teleférico) porque sus coloridas casas reposan sobre el lateral de uno de los cerros de la capital colombiana. Este medio de transporte se convirtió no solamente en un medio vital para un territorio donde los colectivos no llegan con frecuencia y los taxis evitan ir, sino que también en un símbolo del gobierno de Gustavo Petro cuando fue alcalde de Bogotá (2012-2015).
"Eso venía con un presupuesto pequeñito y Petro nos ayudó para lograr un presupuesto más grande. Acá todas las juntas son petristas", dijo a Télam la presidenta de la junta vecinal (Junta de Acción Comunal) del barrio Paraíso, Mercedes Mora de 65 años.
Ciudad Bolívar se divide en barriadas como Paraíso, El Edén, Bella Flor, entre otras y en cada una existe una junta vecinal -no partidarias- cuyos presidentes son electos por voto popular, no reciben un salario y son un lazo reconocido por el gobierno local, por lo cual ofician de interlocutores.
"Todas las juntas acá votan por Petro. Ojalá pueda cumplir todas las promesas que le hizo a la comunidad. Dios quiera que sí porque sino la oposición lo puede bregar", deseó la referente de la junta "Paraíso".
Mora señala uno de los tantos murales que tiene el barrio, que en este caso cuenta su formación desde que migrantes de distintas partes de Colombia se instalaron alrededor de una laguna que nombran con adoración porque les permitió acceder al agua para beber y construir las primeras casas.
"Lo que más necesitamos son oportunidades de trabajo, pavimento y que los comedores comunitarios tengan una continuidad para las personas que solo viven de esa comidita", comentó Mora parada al lado de uno de los comedores vecinales de Ciudad Bolívar, al que asisten unas 450 personas pero estará cerrado hasta septiembre porque son concesiones que son intermitentes, denuncian.
Misael Rodríguez tiene 66 años, tiene una discapacidad y no trabaja, dijo a esta agencia que ahora "le toca al pueblo", que este debe ser el protagonista "y no solo el Presidente".
Votó por Petro y criticó al actual gobierno de Iván Duque porque "el peso (colombiano) y los precios no están controlados" y porque durante las movilizaciones en su contra "hubo muchos muertos". También apuntó a su política exterior porque "hay que tener relaciones con otros gobiernos", incluido el de Venezuela, señaló.
Cuando estuvo en una comisión de obras de la junta comunal, lograron el pavimento de algunas de las estrechas callejuelas del barrio.
Rodríguez comenta también que "todos los días llega gente al barrio" y por eso "el transporte no alcanza".
Y es que Ciudad Bolívar está más cerca del cielo pero su revés es estar más lejos de la tierra. El Edén, otro de sus barrios de la zona, no "tiene derecho a todo", es decir, a diferencia de Paraíso "no está legalizado" (reconocido por Estado), explicó a Télam la presidenta de su junta vecinal Mariela Cortés, de 50 años.
"Con Petro hemos tenido buena relación desde que (como alcalde) vino a lo del (metro) cable. Me tomé una foto con él así que apenas ganó subí la foto. Toda la gente me llamó y me decía 'Bravo doña Mariela, ganamos'", relató Cortés quien además se dedica a comprar productos de limpieza.