Nadia Podoroska regresó ayer al circuito profesional femenino tras 10 meses de ausencia con una contundente victoria sobre la rumana Alexandra Cadantu Ignatik 6-1, 6-1, en la primera ronda del WTA 250 de Varsovia, Polonia.
La rosarina, número 211 del ranking mundial, puso fin a una seguidilla de lesiones que afectaron sus isquiotibiales, la cadera y la espalda desde su último partido en el US Open 2021.
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En su vuelta al círculo mayor, Podoroska (25 años) intentará acercarse a su mejor nivel tenístico que exhibió en la temporada 2020 cuando alcanzó las semifinales de Roland Garros, lo que le permitió semanas después llegar a su registro más alto en el escalafón de la WTA (36º).
En la siguiente ronda (octavos de final), la argentina enfrentará a la brasileña Laura Pigossi (27 años, 113º), quien dejó en el camino a la rusa Varvara Gracheva, número 62 del mundo, con triunfo por 6-2 y 6-4. El Abierto de Polonia se disputa hasta el domingo próximo sobre canchas de polvo de ladrillo en el predio del club Legia Varsovia con 251.750 dólares en premios.