Buenos Aires - En un clima de máximo hermetismo, Cristina Kirchner se reunió ayer tarde con senadores y diputados del Frente de Todos en el salón Azul de la Cámara alta. Los legisladores y la Vicepresidenta analizaron la situación política tras una semana álgida marcada por el pedido de 12 años de prisión en la causa Vialidad y los violentos incidentes entre militantes del Frente de Todos y la Policía de la Ciudad en Recoleta.
Del encuentro -en el que fueron prohibidos los celulares- participaron, entre otros, la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, el jefe del bloque oficialista, Germán Martínez, y los diputados Rodolfo Tailhade, Victoria Tolosa Paz, Marcelo Casaretto, Lucas Godoy y Carolina Gaillard También los senadores Oscar Parrilli, José Mayans y Juliana Di Tullio, referentes de máxima confianza de CFK.
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Los legisladores manifestaron su apoyo a la Vicepresidenta, que fue recibida con aplausos, y repudiaron los recientes episodios de violencia contra manifestantes y contra Máximo Kirchner (de los cuales responsabilizaron al gobierno porteño). En la misma línea, reivindicaron la posibilidad de que "el pueblo se pueda expresar libremente". "Cristina más que nada agradeció el apoyo y mostró una entereza que nos reconforta", aseguró un diputado del norte. "Se habló de seguir para adelante con la defensa de Cristina. Fue una reunión para darnos fuerza", agregó otro legislador que salió del Congreso.
La reunión en el Congreso no fue la única escenificación de apoyo político a CFK. Casi a la misma hora, el Consejo Nacional del Partido Justicialista fue convocado en la histórica sede porteña de la calle Matheu al 100 y de la que participó el presidente Alberto Fernández. Hacia allí se dirigieron con apuro gran parte de los diputados al término de la actividad en el Congreso.
Allí se analizaba los pasos a seguir luego de las movilizaciones en apoyo a la vicepresidenta. El encuentro comenzó a las 18 en la sede de calle Matheu 130, informaron fuentes partidarias. En carpeta figuraba la realización de una marcha en favor de CFK, fijada en principio para el 16 de septiembre. El encuentro también era sin acceso a la prensa.