Confirmando el acierto del Gobierno provincial en el traspaso en 2019 del Ingenio La Esperanza al grupo Budeguer, ayer comenzó la zafra azucarera 2023 con fuertes expectativas de producción, pese a los efectos de la sequía. Asimismo se destacó la importante inversión de la empresa traducido en el aumento de la ocupación a 800 trabajadores (lo recibió con 600) y que llega a 1.000 generados indirectamente, la renovación de cañaverales, la tecnificación de los últimos años, y el acuerdo salarial con una suba del 140% para el personal.
Lejos están aquellos tiempos cuando el Frente de Izquierda y Carolina Moisés, boicoteaban la transferencia del ingenio que venía de quiebra en quiebra durante las distintas gestiones peronistas, con paros, cortes y marchas (igual que hoy con la reforma constitucional).
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Desde el sindicato que nuclea a los obreros resaltaron la reactivación que empezó con la llegada del Grupo Budeguer. Sergio Juárez, secretario general del SOEAIL, refirió "gracias a Dios ya empezaron a rugir los motores de la fábrica, hoy ya se da comienzo la zafra 2023, que era importante, con mucho trabajo, mucha inversión que hizo la empresa este año y que viene haciendo desde que llegó".
En ese sentido, Juárez destacó el crecimiento de la empresa desde 2019. "Vamos creciendo en estos últimos 4 años, tanto en fábrica como en campo, porque hubo plantaciones, hubo renovaciones de los cañaverales que hace más de 20 años no se hacían. Hoy estamos en proceso de decir que de acá a unos años va a volver a ser el Ingenio La Esperanza de sus años de esplendor".
También recalcó el crecimiento la mano de obra en el Ingenio. "Tenemos contabilizados casi 800 obreros