"ARRIBA LAS WHIPALAS, ABAJO LA REFORMA"
Los miembros de las comunidades originarias jujeñas, que llegaron a Buenos Aires el 1 de agosto, instalados en la Plaza Lavalle del centro porteño frente al Palacio de Tribunales, ya cumplen un mes de permanencia. Con esta medida buscan visibilizar los reclamos por sus territorios y por el agua; contra el saqueo de los bienes comunes naturales y la antidemocrática reforma constitucional de Gerardo Morales y el PJ. Durante este mes han recibido el fuerte apoyo de distintos sectores sociales, sindicales y la izquierda, pero también el hostigamiento del gobierno de Larreta en la Ciudad, la ninguneada del gobierno nacional, y hasta fueron atacados con racismo en un medio de comunicación .
EL RECORRIDO
También te puede interesar:
El Malón salió el martes 25 de julio desde La Quiaca y otras localidades de Jujuy provenientes de la Puna, de la Quebrada, de las Yungas, de los Valles, con destino a Buenos Aires. En el camino recorrió más de 1800 kilómetros, a micro y a pie, y otras seis provincias: Salta, Catamarca, Santiago del Estero, Tucumán, Córdoba y Santa Fe.
La decisión de traspasar las fronteras provinciales llegó después de una serie de reclamos denunciados y desoídos puertas adentro. Dulce, 48 años, malonera del Pueblo Churumata, introduce: "Primero, fue por la reforma inconstitucional que llevó a cabo Gerardo Morales.
¿Por qué es inconstitucional?
Porque a los pueblos originarios no se nos consultó su contenido, como fija el convenio internacional de la OIT (Organización Internacional del Trabajo). Pero tiene muchas otras falencias, como no haberle comunicado al resto de la sociedad de qué se trataba hasta muy pocos días antes de la jura; como que había 90 días para discutir la nueva reforma y en menos de tres semanas ya la juraron; como que los políticos que fueron parte de la Convención Constituyente también eran diputados, el mismo gobernador, intendentes, que no renunciaron a sus puestos y ejercieron el doble cargo. Fuimos una genial república bananera, en la que a la noche Morales era gobernador y a la mañanita era constituyente como si fuera una película de muchos años atrás, donde venía un dictador y hacía lo que quería. Así se vive hoy en Jujuy".