La industria del litio está abriendo un nuevo panorama para jóvenes de comunidades originarias y rurales de Jujuy, Salta y Catamarca. El exponencial aumento de población y de la matrícula en escuelas en algunas zonas donde se desarrollan proyectos de litio, son algunos de los indicadores.
El desarrollo exponencial del litio en Jujuy trajo aparejado un crecimiento poblacional, según datos del censo, y un aumento de matrícula en escuelas y del empleo. La industria minera ha conseguido a nivel país, según cifras del Sistema de Información Abierta a la Comunidad sobre la Actividad Minera (Siacam), aumentar en un 59% interanual la cantidad de puestos de trabajo. Puntualmente en la Puna, muchas zonas que habían estado históricamente postergadas son hoy en día una cuna de oportunidades de crecimiento para los jóvenes, quienes ya no tienen que afrontar el costo del desarraigo para desarrollarse laboralmente.
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Susques, en el sudoeste jujeño, donde se encuentra el Salar de Olaroz y tienen operación tanto Minera Exar como Sales de Jujuy, ambas empresas en fase de producción, creció un 34,5% en los últimos 31 años. El mayor impacto de Susques, en tanto, no fue tanto demográfico sino cultural dado que se reflejó en la expansión de las instituciones educativas en la región. Según cifras que surgen de los Anuarios Estadísticos, en general el total de la matrícula educativa en instituciones estatales en 2012 fue de 165 estudiantes, y en 2021, esta cifra aumentó significativamente a 1.164.
Según cifras de la Secretaría de Minería de la Nación, la industria del litio generó más de 38.000 empleos directos que, si se tiene en cuenta el primer anillo de proveedores más cercano, se multiplica a 80.000.