ULTIMO MOMENTO:
El policía de 23 años que asesinó a tiros a su pareja y a una mujer trans que se encontraba con ella en una casa de la ciudad de La Plata, le dijo a un vecino que había matado "a todos", tras lo cual "se subió a su auto y se fue" del lugar hasta su casa, donde se suicidó.
Un hombre identificado como Osmar, dueño de un PH que les alquilaba a las víctimas, dijo que presenció el momento en que el agente Juan Ignacio Soto escapaba de la vivienda situada en la calle 164, entre 62 y 63, del barrio platense de Los Hornos, tras matar a tiros a su pareja, Florencia Sandoval, y a Cielo De Lucca (20).
"Métase, los maté a todos', me dijo, y se subió a su auto y se fue", refirió el testigo, quien vive en la misma construcción y aseguró que no escuchó ninguna discusión previa al hecho.
"Pensé que (el policía) tenía un enfrentamiento con ladrones porque escuché muchos tiros", agregó Osmar y también que oyó a su pareja decir "ayudame Juan".
"Estaba nervioso, entraba y salía a su auto; le pregunté por la ventana qué pasó y me dijo:''métase".
"Pensé que su mujer estaba herida porque se había enfrentado con delincuentes", continuó Osmar, y recordó que vio en el pasillo del PH "a la chica de rodillas con su cuerpo hacia atrás".
El hecho fue cometido el lunes a la tarde y la policía fue alertada al 911 por vecinos que escucharon disparos en esa vivienda; al llegar, los efectivos de la comisaría de la zona hallaron en la vereda a una mujer fallecida, quien presentaba varios impactos de arma de fuego en la zona de la espalda.
Luego, cuando ingresaron a la casa, encontraron a una mujer trans aún con vida con orificios de bala en distintas partes del cuerpo, pero cuando los médicos llegaron para auxiliarla, ya había fallecido.
Luego los policías se enteraron que el homicida se movilizaba en un automóvil Volkswagen Gol Trend Blanco, por lo que se montó un intenso operativo cerrojo para localizarlo.
Finalmente, el auto fue hallado por una patrulla motorizada que inició una persecución hasta las calle 166, donde el hombre lo abandonó e ingresó al domicilio pese a la voz de alto de los policías, que a los pocos segundos escucharon una detonación de arma de fuego. Se había baleado en la cabeza.
Inmediatamente lo llevaron a un hospital, falleció a las pocas horas.
